viernes, 12 de diciembre de 2008

ME BAÑÉ CON LA LUNA


Sin darse cuenta
el poeta,
cayendo el sol,
crepúsculo llegando,
llegó a río seco.
Lago emboscado
por montículos,
en las cercanías
del Mulhacén.

Entrando en un
trance libertino,
místico, alucinando
con el panorama.

Desprendiéndose
de toda moralidad
y vestimenta, qfueda
desnudo ante el lago,
sin misterios ni tapujos,
sincerándose con el viento.

El asombro le invade,
viéndose bañar con
el reflejo lunar,
sensación sin par.

Delirando, exclama,
¡me bañé!, ¡me bañé!
con la luna,
orgasmo lírico,
hecho realidad.

Cayéndole las
lágrimas por las
mejillas, tras la
emoción y acordándose
de Granada y sus gentes.

No hay comentarios: