Un día mustio,
la inspiración ausente,
mi lira no dentea
sus cuerdas,
yo desespero.
Una cuartilla,
cartulina, lienzo,
máquina de escribir,
pluma, pincel... .
Anhelando captar
esa silueta, forma
indefinida, meciéndose
en la sombra del vacío,
queriendo ser un poema,
ilustración... .
Yo, desorientado,
cayendo el sol,
desespero.
El poema la silueta,
ocultándose
en la tiniebla.
Es la impotencia
de reflejar la idea,
el sentimiento,
la agonía del poeta.
Inundándole el sentir,
la cercanía de
una muerte amiga,
sensibilizándose, suspirando
y reflexionando.
Renace su lira poética
versificando el sentimiento,
desahogándose en
la cuartilla, cartulina.
Naciendo el poema,
la enigmática ilustración.
viernes, 20 de febrero de 2009
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